Si buscas una planta comestible de bajo mantenimiento, crecimiento rápido y que se adapte perfectamente al alféizar de tu ventana, los cebollines (también conocidos como cebollas verdes o cebollas de primavera) son la elección ideal. Son una de las hortalizas más fáciles de cultivar en macetas: compactas, de rápida cosecha y capaces de volver a crecer después de cada corte. Son perfectas para cualquier huerto urbano, especialmente si vives en un apartamento o tienes poco espacio.


🌿 ¿Por qué cultivar cebollines en macetas?

Los cebollines son prácticamente hechos para el cultivo en contenedores. Tienen raíces poco profundas, no requieren mucha tierra y crecen bien tanto en interiores como en exteriores, siempre que reciban suficiente luz. Una pequeña maceta en tu cocina puede ofrecerte un suministro constante de hojas frescas para sopas, salteados, ensaladas o guarniciones.

A diferencia de muchos cultivos que tardan meses en madurar, los cebollines pueden cosecharse en solo unas semanas. Además, se regeneran después de la cosecha, permitiendo múltiples cortes de la misma planta.


🌱 Lo que necesitarás

No hace falta tener herramientas ni equipos caros. Solo reúne lo siguiente:

  • Una maceta o contenedor con buen drenaje

  • Sustrato ligero enriquecido con compost u otra materia orgánica

  • Semillas, bulbitos o raíces sobrantes de cebollines comprados

  • Luz solar directa (o una lámpara de crecimiento si los cultivas en interiores)

Incluso puedes reutilizar los restos de cebollines del supermercado: corta las partes verdes, deja unos 2–3 cm del tallo blanco con raíces y plántalos directamente en la tierra húmeda.


🪴 Elegir el contenedor adecuado

Los cebollines no necesitan macetas profundas. Un recipiente de 15 a 20 cm de profundidad y lo bastante ancho para varias plantas es suficiente. Las jardineras alargadas o los recipientes reciclados con agujeros de drenaje funcionan muy bien.

Para cosechas continuas, planta en filas o secciones escalonadas, de modo que mientras unos cebollines crecen, otros estén listos para cortar.


🌾 Mejor tipo de suelo

Utiliza un sustrato suelto y bien drenado, evitando la tierra del jardín que tiende a compactarse. Mezcla un poco de compost o fertilizante orgánico equilibrado antes de plantar para estimular un buen crecimiento.

El pH ideal está entre 6.0 y 7.0, ligeramente ácido o neutro. Mantén la tierra aireada para que las raíces se desarrollen con facilidad.


🌰 Cómo plantar cebollines

Existen tres métodos comunes para cultivarlos en macetas:

  1. Desde semillas: siembra las semillas a unos 0,5 cm de profundidad y deja 2–3 cm entre ellas. Cubre con tierra y riega con cuidado. Germinan en 7–14 días.

  2. Desde bulbitos: planta cada bulbo a 2–3 cm de profundidad y deja 3–5 cm entre ellos. Crecen más rápido que desde semillas.

  3. Desde restos de cocina: coloca las bases con raíces en tierra húmeda, dejando que sobresalga la parte superior. Es el método más rápido y sencillo para cultivar en interiores.


☀️ Luz y temperatura

Los cebollines necesitan de 6 a 8 horas diarias de luz solar. Coloca la maceta en una ventana soleada, balcón o patio. Si los cultivas dentro de casa, usa una luz de crecimiento LED durante los días cortos del invierno.

Prefieren temperaturas entre 13°C y 24°C, por lo que crecen mejor en primavera y otoño.


💧 Riego y fertilización

Mantén la tierra húmeda pero no encharcada. Riega cuando la capa superior del sustrato (unos 2 cm) esté seca. Las macetas se secan rápido, así que revisa con frecuencia, sobre todo en climas cálidos o si están cerca de fuentes de calor.

Aplica un fertilizante líquido diluido cada dos o tres semanas, especialmente si cosechas con frecuencia. No abones en exceso, ya que puede producir tallos débiles o blandos.


✂️ Cosecha de cebollines

Podrás cosechar tus cebollines de 30 a 50 días después de la siembra, según el método utilizado. Estarán listos cuando alcancen unos 15–20 cm de altura.

Tienes dos opciones de cosecha:

  • Cortar las hojas verdes: deja 2–3 cm sobre el suelo; la planta volverá a brotar varias veces.

  • Arrancar toda la planta: si deseas usar la base blanca y las raíces. Luego puedes volver a plantar nuevos bulbitos o restos.

Cosecha regularmente para fomentar un crecimiento continuo y mantener un suministro constante.


⚠️ Problemas comunes y cómo solucionarlos

  • Hojas amarillas: exceso de agua o mal drenaje.

  • Crecimiento lento: poca luz o falta de nutrientes. Mueve la maceta a un lugar más soleado o abona ligeramente.

  • Plantas muy juntas: aclara las plantas para mejorar la circulación de aire.

Las plagas son raras, pero si ves pequeños insectos (como pulgones), enjuaga las hojas o rocía con una solución jabonosa suave.


🌼 Conclusión

Los cebollines son una de las hortalizas más fáciles y agradecidas de cultivar en maceta, ideales para principiantes o amantes de la cocina con poco espacio. Con un poco de cuidado, tu pequeña maceta puede darte cebollines frescos durante meses.