Las cebollas son un ingrediente básico en cocinas de todo el mundo, aportando sabor y aroma a innumerables platos. Afortunadamente, no necesitas un jardín para cultivarlas. Ya sea que tengas un balcón soleado, una terraza o simplemente un alféizar con buena luz, las cebollas pueden prosperar en macetas. Con la variedad adecuada, un buen sustrato y un poco de cuidado, puedes cultivar cebollas desde la semilla hasta la cosecha, incluso en espacios reducidos.
Aquí tienes una guía completa para cultivar cebollas en macetas, desde la siembra hasta disfrutarlas salteadas en tus recetas caseras.
🧅 Elegir las variedades de cebolla adecuadas para macetas
Existen distintos tipos de cebollas, y elegir la variedad correcta es clave para tener éxito en el cultivo en contenedores.
Las cebollas se dividen en tres categorías principales:
-
Cebollas de día corto: Ideales para regiones del sur con inviernos suaves. Forman bulbos cuando los días duran entre 10 y 12 horas.
-
Cebollas de día largo: Recomendadas para zonas del norte, donde los días de verano alcanzan entre 14 y 16 horas de luz.
-
Cebollas de día intermedio: Perfectas para regiones de clima templado o zonas centrales.
Si lo que deseas es cultivar cebollines o cebollas tiernas (green onions), puedes usar cualquier variedad y cosechar antes de que se formen los bulbos.
Para el cultivo en macetas, elige variedades compactas y de maduración rápida, como:
-
White Lisbon
-
Evergreen Bunching
-
Red Burgundy
-
Candy
-
Texas Early Grano
🪴 Elegir la maceta correcta
Aunque las cebollas tienen raíces poco profundas, necesitan espacio suficiente para crecer correctamente.
Elige una maceta de al menos 25–30 cm de profundidad y lo bastante ancha para acomodar varias plantas con unos centímetros de separación.
Puedes cultivar:
-
Cebollas de bulbo: En contenedores anchos, dejando entre 10 y 15 cm entre plantas.
-
Cebollines: En macetas más pequeñas o incluso en envases reciclados.
Asegúrate de que el recipiente tenga buen drenaje; el exceso de agua provoca pudrición de raíces y otros problemas.
🌱 Preparar el sustrato
Las cebollas prosperan en un suelo suelto, fértil y bien drenado.
Mezcla ideal para macetas:
-
2 partes de sustrato para macetas de buena calidad
-
1 parte de compost o estiércol bien descompuesto
-
Un puñado de perlita o arena gruesa para mejorar el drenaje
-
(Opcional) una pizca de harina de hueso o fertilizante de liberación lenta
Evita el suelo compactado, ya que impide el desarrollo de las raíces y de los bulbos.
Antes de sembrar, humedece ligeramente el sustrato para asegurar una distribución uniforme de la humedad.
🌰 Siembra: semillas, bulbitos o plántulas
Puedes cultivar cebollas de tres formas:
-
Desde semillas: Siembra en interior de 8 a 10 semanas antes de la última helada.
-
Desde bulbitos (sets): Son pequeños bulbos inmaduros, fáciles de plantar y de crecimiento rápido.
-
Desde plántulas: Cebollas jóvenes listas para trasplantar a la maceta.
Cómo plantar:
-
Llena la maceta con el sustrato preparado, dejando 2–3 cm libres hasta el borde.
-
Siembra las semillas a 0,5 cm de profundidad, dejando 2–3 cm entre ellas (puedes aclarar después).
-
Si usas bulbitos, introdúcelos a 2–3 cm de profundidad, con la punta hacia arriba y separados unos 8–10 cm.
-
Riega suavemente pero en profundidad.
Coloca la maceta en un lugar muy soleado, como un balcón orientado al sur o una ventana luminosa, donde reciba al menos 6–8 horas de luz directa al día.
💧 Riego y fertilización
Las cebollas necesitan humedad constante, pero sin encharcamientos.
Riega cuando la capa superior del sustrato (unos 2–3 cm) empiece a secarse. Evita el exceso de agua, que puede causar enfermedades en las raíces.
Fertilización recomendada:
-
Usa un fertilizante líquido equilibrado (10-10-10) cada 2–3 semanas.
-
Cuando los bulbos comiencen a formarse, cambia a un fertilizante bajo en nitrógeno y rico en potasio.
-
Si prefieres opciones orgánicas, aplica té de compost o emulsión de pescado.
🌿 Cuidados generales
-
Coloca una capa de mulch (paja, hojas secas o virutas) para conservar la humedad y evitar malas hierbas.
-
Gira la maceta ocasionalmente para una iluminación uniforme.
-
Vigila posibles plagas como trips, pulgones o larvas de mosca de la cebolla; controla con jabón insecticida o aceite de neem.
-
Retira hojas marchitas o amarillas para prevenir hongos.
-
Evita el exceso de plantas por maceta: la buena circulación de aire es esencial para prevenir enfermedades.
🧄 Cosecha de tus cebollas
-
Cebollines o cebollas tiernas: Puedes cosecharlos cuando alcancen 15–20 cm de altura. Corta las hojas según necesites o arranca la planta entera si prefieres los bulbos jóvenes.
-
Cebollas de bulbo: Estarán listas cuando:
-
Las hojas empiecen a ponerse amarillas y caigan.
-
Los bulbos se vean abultados en la base.
-
Procedimiento:
-
Deja de regar una semana antes de la cosecha para que los bulbos se sequen un poco.
-
Extrae las cebollas con cuidado.
-
Déjalas secar (curar) en un lugar seco, ventilado y con sombra durante 1–2 semanas.
-
Recorta raíces y hojas una vez estén secas.
-
Guarda las cebollas en un lugar fresco y seco con buena ventilación; bien curadas, pueden durar varios meses.
🔁 Bonus: reutiliza restos de cocina
Puedes rebrotar cebollines a partir de restos.
Coloca la base blanca (con raíces) en un vaso con agua, de modo que las raíces queden sumergidas. En pocos días verás nuevos brotes verdes.
Cuando crezcan unos centímetros, trasplántalos a una maceta con tierra y seguirán desarrollándose.
🌼 Conclusión
Cultivar cebollas en macetas es una forma práctica y gratificante de añadir sabor fresco y natural a tus comidas.
Ya sea que coseches cebollines tiernos o cebollas bulbosas completas, este cultivo en contenedor es fácil, económico y perfecto para cualquier espacio.
Con el cuidado adecuado, tu pequeño huerto puede ofrecerte grandes sabores durante todo el año, ¡directo de la maceta al sartén! 🍳


