Crecen rápido, producen abundantemente y requieren muy poco espacio, lo que los convierte en una opción ideal para jardineros urbanos o para quienes cuentan con poco lugar. Además, al cultivarlos en cajas recicladas, pueden prosperar perfectamente en un balcón, terraza o cualquier rincón soleado.

Reutilizar cajas como contenedores de cultivo no solo ahorra espacio, sino que también promueve la sostenibilidad. Este método da nueva vida a materiales usados y, al mismo tiempo, provee a tu cocina de un suministro constante de ejotes frescos y crujientes.

¿Por qué cultivar ejotes en cajas?

Usar cajas como macetas ofrece varias ventajas:

  • Drenaje: Las cajas permiten que el exceso de agua se escurra fácilmente, evitando la pudrición de raíces.

  • Portabilidad: Se pueden mover con facilidad para aprovechar mejor el sol o resguardarlas del mal tiempo.

  • Económicas: Muchas veces se pueden conseguir cajas de madera o plástico usadas de forma gratuita o a muy bajo costo.

  • Tamaño ideal: Los ejotes no necesitan suelos muy profundos; una caja de 25 a 30 cm de profundidad es suficiente.

Ya sea que elijas variedades arbustivas o trepadoras, el cultivo en cajas hace posible disfrutarlas incluso en espacios muy reducidos.

Elegir la variedad adecuada de ejote

Existen dos tipos principales de ejotes:

  • Ejotes arbustivos (bush beans): Son compactos, alcanzan entre 30 y 60 cm de altura y no necesitan tutor. Son perfectos para cajas.

  • Ejotes trepadores (pole beans): Crecen en forma de enredadera y requieren soporte vertical, pero producen durante más tiempo y en mayor cantidad.

Si cuentas con espacio vertical o puedes colocar una rejilla o enrejado junto a la caja, los ejotes trepadores son una excelente opción. De lo contrario, los arbustivos son más sencillos y prácticos.

Preparación de la caja

  1. Revisa las aberturas: Forra el interior con una tela transpirable, como arpillera, tela de paisaje o una funda vieja, para mantener el sustrato dentro y permitir el drenaje.

  2. Asegura el drenaje: Si la caja no tiene orificios, haz algunos en la base.

  3. Ubicación: Coloca la caja en un lugar que reciba entre 6 y 8 horas de sol directo al día.

Mezcla de suelo para un crecimiento saludable

Los ejotes prefieren un suelo suelto, fértil y bien drenado. Una mezcla ideal incluye:

  • 1 parte de compost

  • 1 parte de sustrato de calidad

  • 1 parte de perlita o arena gruesa para aireación

Aunque los ejotes fijan nitrógeno en el suelo, al inicio conviene agregar un poco de fertilizante orgánico para estimular el crecimiento, especialmente si el compost es escaso.

Siembra de ejotes en cajas

  • Espaciado: Siembra las semillas a unos 8–10 cm de distancia para ejotes arbustivos y 10–15 cm para los trepadores.

  • Profundidad: Planta cada semilla a unos 2–3 cm en suelo húmedo.

  • Riego: Después de sembrar, riega con cuidado y mantén el sustrato húmedo pero no encharcado.

Las semillas germinan rápido —en una semana aproximadamente— y crecen con vigor.

Soporte para ejotes trepadores

Si eliges variedades trepadoras, necesitarás una estructura de soporte:

  • Inserta cañas de bambú, varas delgadas o cuerdas en las esquinas de la caja.

  • Deja que las enredaderas suban naturalmente a medida que crecen.

  • También puedes ubicar la caja junto a una barandilla o una celosía.

Cuidados continuos

  • Riego: Mantén el suelo húmedo, sobre todo durante la floración y la formación de vainas. Riega cuando la capa superior esté seca.

  • Fertilización: Una vez establecidos, los ejotes no necesitan mucho abono. Un exceso de nitrógeno produce muchas hojas y pocas vainas.

  • Deshierbe: Retira las malas hierbas que compitan por nutrientes.

  • Plagas: Vigila pulgones, escarabajos y ácaros. Si aparecen, aplica aceite de neem o jabón insecticida.

Cosecha de los ejotes

  • Cuándo cosechar: Recolecta las vainas cuando estén tiernas, de unos 10–15 cm, según la variedad.

  • Cómo cosechar: Corta o pellizca suavemente las vainas sin dañar la planta. Cosecha con frecuencia para estimular una producción continua.

  • Almacenamiento: Guárdalas en el refrigerador hasta por una semana, o blanquéalas y congélalas para conservarlas más tiempo.

Cuanto más coseches, más producirán tus plantas. Una sola caja puede ofrecer varias cosechas a lo largo de la temporada.

Mantenimiento posterior

Después de la cosecha:

  1. Retira las plantas viejas y agrégalas al compost.

  2. Remueve y airea la tierra, agregando nuevo compost.

  3. Practica la rotación de cultivos: después de los ejotes, siembra verduras de hoja o raíces para mantener equilibrado el suelo.

Con un mantenimiento básico, tu caja puede reutilizarse temporada tras temporada.

Conclusión

Los ejotes son un cultivo fácil, productivo y perfecto para espacios pequeños. Con una caja reciclada, un poco de tierra y buena luz solar, puedes disfrutar de ejotes frescos a unos pasos de tu cocina. Ya sean arbustivos o trepadores, cultivar en cajas te permite saborear el auténtico gusto de lo casero sin necesidad de un huerto tradicional.