El repollo es una verdura versátil y nutritiva que ha sido un alimento básico en huertos y cocinas durante siglos. Cultivar tu propio repollo en casa puede ser gratificante y económico, especialmente si inicias las plantas en interiores. Una de las formas más creativas y sostenibles de hacerlo es utilizando botellas de plástico como celdas para la germinación. Este método no solo ayuda a reciclar, sino que también brinda a las plántulas de repollo un entorno protegido para brotar y fortalecerse antes de ser trasplantadas al exterior.

Al convertir botellas desechadas en mini macetas, puedes crear un sistema de propagación económico que funciona perfectamente en espacios reducidos como alféizares, balcones o pequeños rincones de cultivo interior.

¿Por qué iniciar el repollo en interiores?

El repollo se desarrolla mejor en climas frescos, pero las semillas y plántulas jóvenes son muy sensibles a las fluctuaciones de temperatura y a las plagas. Sembrar en interiores ofrece varias ventajas:

  • Control de condiciones: puedes manejar la luz, la humedad y la temperatura.

  • Protección contra plagas: las plántulas estarán seguras de babosas, gusanos cortadores y otras amenazas comunes.

  • Cosechas más tempranas: al iniciar en interior, obtendrás repollos maduros antes en la temporada.

  • Uso eficiente del espacio: mientras tus plántulas crecen dentro, las camas del jardín permanecen libres para otros cultivos.


Materiales necesarios

  • Botellas plásticas transparentes o semitransparentes (de 1 a 2 litros).

  • Tijeras o cuchillo afilado.

  • Sustrato para germinación o tierra ligera para macetas.

  • Semillas de repollo (de la variedad de tu preferencia).

  • Una bandeja o recipiente poco profundo para colocar las botellas.

  • Regadera pequeña o atomizador de agua.


Preparación de las celdas de botella

  1. Limpieza: lava bien las botellas con agua y jabón.

  2. Corte: corta cada botella por la mitad o justo por encima de la mitad; la parte inferior será la celda de cultivo.

  3. Drenaje: haz 2–3 pequeños agujeros en la base para que el agua pueda escurrir.

  4. Colocación: organiza las mitades en una bandeja para recoger el exceso de agua.

Estas celdas caseras funcionan igual que las bandejas de semillero comerciales, pero son más resistentes y ecológicas.


Siembra de semillas de repollo

  1. Rellenar con sustrato: coloca tierra ligera dejando 1–2 cm libres en la parte superior.

  2. Sembrar: introduce las semillas a 0,5–1 cm de profundidad, 2–3 por celda.

  3. Riego: humedece suavemente la tierra, evitando encharcar. Un atomizador es ideal.

  4. Luz: coloca las celdas en un lugar soleado o bajo luz artificial durante 12–14 horas al día.

En unos 5–10 días deberían comenzar a brotar las primeras plántulas.


Cuidados de las plántulas en botellas

  • Aclareo: cuando aparezcan las primeras hojas verdaderas, deja solo una plántula por celda cortando las más débiles a nivel del suelo.

  • Humedad: mantén el sustrato húmedo pero no empapado. La botella ayuda a retener la humedad.

  • Temperatura: lo ideal es entre 18–24 °C durante el día; el repollo tolera noches más frescas.

  • Ventilación: si usas la parte superior de la botella como tapa, retírala cuando broten para evitar hongos.


Trasplante al exterior

Las plántulas de repollo estarán listas para trasplantarse a los 4–6 semanas, cuando midan unos 10 cm y tengan varias hojas verdaderas. Antes de llevarlas al jardín, es importante aclimatarlas:

  • Día 1–2: ponlas en un lugar sombreado al aire libre por unas horas.

  • Día 3–5: aumenta gradualmente el tiempo y la exposición al sol directo.

  • Día 6–7: déjalas afuera toda la noche si el clima es suave.

Una vez endurecidas, transplántalas en camas preparadas o macetas grandes, dejando entre 30–45 cm de separación, según la variedad.


Beneficios del uso de botellas

  • Económico: no necesitas comprar semilleros.

  • Ecológico: das un nuevo uso a las botellas de plástico.

  • Versátil: se adapta a distintos cultivos, no solo repollo.

  • Práctico: puedes mover fácilmente las celdas dentro o fuera según convenga.


Consejos para evitar problemas

  • Plántulas débiles o alargadas: puede faltar luz; acércalas más a una ventana soleada o usa lámpara de cultivo.

  • Hongos (damping-off): mejora la ventilación retirando las tapas.

  • Resequedad del sustrato: revisa con frecuencia, ya que los recipientes pequeños se secan rápido.


Reflexión final

Iniciar el repollo en interiores con celdas de botellas de plástico es un método ingenioso, accesible y sostenible que facilita la propagación incluso a principiantes. Garantiza plántulas más fuertes, reduce residuos y mejora la transición al cultivo exterior.