El azafrán, también llamado “oro rojo”, es una especia otoñal que no crece en todas partes y es capaz de dar un sabor característico a los alimentos.

Su precio ciertamente no es modesto. Es por eso que cultivarlo y tenerlo siempre disponible en casa es una excelente manera de ahorrar mucho dinero. A continuación te explicamos cómo cultivar azafrán en casa .

  1. El azafrán no se cultiva con semillas, sino con bulbos. Este tipo de raíz no es fácil de encontrar. Visita tiendas especializadas y descubre dónde encontrarlas.
  2. Una vez que tengas los bulbos, es hora de plantarlos. Hazlo a finales de marzo, cuando el invierno esté a punto de terminar. Usa una maceta rectangular de 10 cm y planta los bulbos a 20 cm de distancia. Asegúrate de que la maceta drene bien el agua, ya que aunque la humedad es importante para esta planta, demasiada agua podría matarla.
  3. Durante el verano, riégala como cualquier otra planta, alternando los días y dosificando el agua. Una vez que aparecen las flores, reduzca la frecuencia de riego. Cuando vuelva a empezar el frío, cúbrelo con un plástico.
  4. Cuando el azafrán florece hay que quitarle el pistilo a la flor. Es el hilo rojo que usarás para dar sabor a tus comidas. Guarde los pistilos en un frasco de vidrio a temperatura ambiente.
  5. Cuando el azafrán se seca, o se caen las hojas, ha llegado el momento de vaciar el bote y quitar los bulbos: debe ser en junio. Planta los bulbos nuevamente, como en el paso 1, y repite el ciclo.